Como viejos amigos, nuestra relación con Arizmendi es cercana, transparente, sólida y de confianza. Y, también Arizmendi, mantiene una relación así con su entorno, construido en confianza. Es una Ikastola que además de transformar la educación, tiene pasión por transformar la sociedad. Desde la confianza va a conseguir ese cambio y nosotros también nos sumamos a ese cambio, porque nos sentimos parte de la comunidad, en parte.
Los proyectos que se trabajan con toda la comunidad suelen tener una base sólida y el resultado suele ser coherente, sólido y diferenciador. Ejemplo de ello es la última campaña de matriculación de Arizmendi Ikastola. Hemos dado vida a los valores de marca y hemos traído a la campaña los puntos fuertes del proyecto educativo, en colaboración con la campaña de Euskal Herriko Ikastolen Elkartea.